Su nuevo destino pastoral será en la localidad de Peñarroya-Pueblonuevo

Este martes ha tenido lugar la misa de despedida del sacerdote Pablo Fernández Grande, que ha estado al frente de la Parroquia de Nuestra Señora del Rosario durante los dos últimos años. Un acto al que ha asistido la alcaldesa, Mari Fe Muñoz, acompañada por los tenientes de Alcaldía, M. Carmen Leiva y Pedro Cano.

Al término de la eucaristía, que ha contado con el acompañamiento musical del Grupo Rociero de Priego, la primera edil ha agradecido en nombre de todo el municipio «la labor que ha realizado durante estos años», indicando que «nos hubiese gustado que continuase en nuestra Parroquia dada la buena sintonía y colaboración que ha existido entre la Parroquia y el Ayuntamiento en este tiempo, siempre en beneficio de nuestros vecinos y vecinas y que espero continúe con el nuevo párroco».

Tras ello, la alcaldesa hizo entrega de una miniatura de un Danzante de San Isidro, una de las señas de identidad más destacadas del patrimonio cultural de localidad.

Al término del acto, y por gentileza del Consistorio y la Parroquia, se ha ofrecido a lo asistentes una invitación como homenaje al padre Fernández Grande que próximamente continuará su labor pastoral en la localidad de Peñarroya-Pueblonuevo.